Hay momentos en los que se necesita resolver una visualización puntual sin comprometer recursos, tiempo ni estructura. El Plan Flex está pensado para eso: una solución operativa, clara y directa, sin rigidez ni dependencia. Este plan permite activar un proyecto cuando se necesita, sin suscripción ni previsión a largo plazo. Con la misma calidad, el mismo proceso interno y la misma atención profesional que cualquier otro encargo de VISUREND. Funciona bien cuando hay un pico de carga, un cliente inesperado o una propuesta que no puede esperar. Pero también cuando se quiere empezar a colaborar sin estructuras previas, para comprobar el encaje operativo antes de establecer una relación más estable.
El Plan Flex es útil en fases iniciales, en estudios pequeños o en proyectos donde la frecuencia de trabajo es variable. No requiere ningún volumen mínimo ni genera compromisos de continuidad. Se activa por proyecto, se presupuesta de forma individual, y se trabaja bajo los mismos estándares internos que en el resto de planes.
Es especialmente adecuado cuando se necesita visualizar un concepto de forma rápida y clara, presentar un proyecto sin contar aún con una estructura visual establecida, o se quiere testar la colaboración antes de comprometer una producción mensual.
También funciona como solución de apoyo en momentos en los que el equipo interno no puede asumir más carga o necesita liberar tiempo.
Cada proyecto en Plan Flex comienza con una toma de información estructurada a través de nuestro formulario digital de inicio. A partir de ahí, se activa el canal de comunicación privado, se validan los materiales recibidos y se define el calendario de entregas según el tipo de servicio requerido: render estático, recorrido 360° o vídeo.
El cliente recibe una propuesta clara, con alcance, tiempos y condiciones definidas. Una vez validada, se inicia la producción. Las entregas incluyen los mismos estándares de formato y optimización que en cualquier otro plan. Y las revisiones están pautadas de antemano para asegurar claridad y orden. Este proceso no está pensado para generar fricción. Está diseñado para resolver bien, sin añadir carga.
En Plan Flex, el cliente puede esperar la misma atención al detalle, el mismo rigor técnico y la misma lógica operativa que en cualquier otro modelo de colaboración con VISUREND. La diferencia no está en la calidad. Está en la estructura del acuerdo.
Cada encargo se trata como una unidad completa: con sus propias validaciones, su seguimiento individual y sus entregables listos para su uso en presentaciones, propuestas o documentación técnica. Flex no es una versión simplificada. Es una forma concreta de empezar a colaborar con nosotros cuando se necesita una solución puntual, sin anticipar más de lo necesario.
Muchos clientes que comienzan en Plan Flex acaban migrando a Plan Pro o Enterprise cuando el flujo de trabajo se estabiliza o crece. Pero esa transición no está forzada. Está diseñada para que, si llega, se produzca de forma natural y sin rupturas. Los estándares son los mismos. Lo que cambia es la continuidad y el volumen. Por eso Flex es también una vía útil para iniciar una colaboración, comprobar el encaje operativo y decidir después si tiene sentido ampliar el marco de trabajo.
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